Ser nómada digital es una de las ideas que más se escuchan ahora cuando hablamos de estilo de vida, el nuevo paradigma laboral o cuáles son las profesiones del futuro.
Sin embargo, a pesar de que escuchamos este término aquí y allí, muy poca gente sabe realmente qué significa ser un nómada digital y/o cuál es la realidad de esta forma de vivir.
Por eso, desde la Escuela Nómada Digital (conmigo (Antonio G.), detrás del teclado) queremos explicarte en profundidad en qué consiste y que así puedas formarte tu propia opinión al respecto. Y por supuesto, si tu idea es cambiar de vida y reinventarte como nómada digital, también te explicaremos cuáles son los primeros pasos que debes dar.
Ready?
Well let’s start.
Empecemos por el principio, con una definición:
Un nómada digital o digital nomad es una persona que utiliza Internet para desempeñar su ocupación y/o para vender sus conocimientos a otras personas o empresas. En otras palabras, trabaja de forma remota, cuestión que le permite poder llevar una “vida nómada”, es decir, poder vivir viajando.
De esta definición podemos extraer varias ideas a modo de características.
En definitiva, este nuevo estilo de vida te muestra que hay otra forma de hacer las cosas.
Si tu deseo es viajar, trabajar de algo que te llene y tener una buena remuneración (siempre parece que está reñido ganar dinero y trabajar en algo que te apasiona), puedes hacerlo. Olvídate de todo lo que escuchas por ahí acerca de Internet o los negocios online. El 99% de las opiniones hablan sin saber o basándose en prejuicios o miedos.
Yo te voy a hablar desde mi experiencia y desde la de todos los alumnos que se han formado conmigo. Hace años que vivo como nómada digital y tengo un negocio que funciona, así creo que algo sé del tema. 😉
Tras la revolución industrial, no se ha conocido otro cambio tan grande como el que estamos viviendo con la irrupción de Internet y la entrada en la denominada era de la información.
Las nuevas tecnologías lo han cambiado todo, eso es obvio.
Cómo nos comunicamos con los demás, cómo establecemos relaciones, nuestra forma de interpretar el mundo y, por supuesto, la forma de trabajar.
¿Qué tiene que ver el nomadismo digital y el cambio en la cultura del trabajo?
Mucho.
Podríamos decir que ambos se retroalimentan. Me explico.
Todos estamos cansados de oír hablar del presentismo, de calentar la silla y de trabajos poco motivadores que anulan las capacidades de las personas.
Al calor de Internet surge una nueva concepción, trabajos más libres e independientes donde se abandona el modelo paternalista para que el trabajador se implique, tome decisiones y se esfuerce en conseguir unos objetivos.
No se trata de estar “X” horas en la oficina, sino de conseguir “X” resultados.
Como si estuviésemos programados para ello, a todos nos han inculcado que teníamos que estudiar, encontrar un buen trabajo, casarse, comprar una casa, tener hijos… Pero al romper la idea de la necesidad de estar en un sitio, se abren las puertas a un estilo de vida más libre donde puedes vivir viajando y trabajando.
A esto hay que añadirle que junto a este nuevo estilo de vida, aparece una línea de pensamiento más responsable acerca de la vida de cada persona.
Se rompe con la idea de “víctima del sistema”, para pasar a una concepción donde cada uno decide lo que desea para su vida y actúa como tal. Desde luego, la presión social no desaparece, pero cuando la persona es consciente de que responsabilidad de su vida cae en ella misma, es capaz de actuar de manera más libre.
¿Acaso tú que estás leyendo ahora estas líneas no te has preguntado alguna vez si la vida que ahora llevas era lo que de verdad querías, o has tenido miles de dudas por no saber qué hacer con tu vida?
Me juego algo a que sí.
Porque si no fuese así y tuvieses todo claro, no creo que estuvieses interesado en leer sobre qué es un nómada digital. 😉
Pero ahora es cuando llega la gran pregunta.
“Vale Antonio, todo esto de trabajar viajando por el mundo está muy bien, pero yo necesito comer y pagar las facturas”.
Lógico.
Antes de dejar tu trabajo o hacer cualquier cambio en tu vida, necesitas saber que vas a ganar el dinero suficiente como para poder mantenerte.
Pues déjame decirte una cosa.
No solo tienes la opción de ganar un sueldo decente, sino que puedes montar un negocio que te permita tener el estilo de vida que desees. Te lo argumento:
Los 2 puntos anteriores nos llevan a una realidad: además de dinero, con un negocio online también puedes ganar tiempo, el activo más importante para cualquier persona.
Tiempo para hacer lo que te haga feliz. Ya sea viajar, estar con tu familia, caminar o cualquier otra cosa. Por eso te decía más arriba que el hecho de ser nómada digital, también nace con la necesidad vital de muchas personas de romper con el estilo de vida que te intenta imponer la sociedad.
Ser nómada digital y tener un negocio online te abre las puertas a generar dinero y tener tiempo, después, con ello, tú podrás hacer lo que quieras.
Ya te mencioné esto cuando vimos la definición. Una característica de todos los nómadas digitales es que trabajan a través de Internet, pero eso no quiere decir que todos sus negocios se basen en el mismo modelo.
De hecho, hay 3 tipos de nómadas distintos.
Un freelance (autónomo o persona que trabaja por cuenta propia) es alguien que vende servicios. Es decir, tú le contratas para que haga un trabajo para ti.
Pueden ser miles de cosas:
En este caso, a esto hay que añadirle que ese servicio se realizaría online. La persona no tendría que desplazarse hasta una oficina o tu casa.
Esto se ve de forma muy clara con los asesores, consultores o coach. Ahora que realizar una videollamada es lo más sencillo del mundo, pueden ofrecer este servicio ahorrándose el tener que pagar un local.
Antes ya hablamos de los ingresos pasivos, de generar ingresos sin vender tu tiempo.
Suena interesante, ¿no?
Además de la publicidad online, en los negocios online hay otra forma de ganar estos ingresos pasivos: los infoproductos.
Un infoproducto es un producto digital en el que el creador explica o transmite su conocimiento y experiencia acerca de un tema.
Por antes hay que explicar un punto importante: ¿qué es un producto digital?
Se trata de un producto no físico y que gracias a eso se puede distribuir por Internet sin casi costes. Por ejemplo, un producto digital puede ser un ebook con una guía sobre un país que vayas a visitar, un audiolibro o un curso online, una app para el móvil, una plantilla, etc.
Piénsalo, una vez escrito un ebook, puedes venderlo infinitas veces sin que eso implique un mayor coste al crear las copias o distribuirlo. Se escalan los ingresos pero no los costes. De ahí la gracia.
Por eso este modelo es perfecto para viajeros. Mientras tú recorres el mundo, tu negocio está generando dinero sin falta de que tú estés pendiente.
Muchas personas me comentan que la idea de vivir viajando o, simplemente, trabajar desde casa, les atrae. Sin embargo, el convertirse en freelance o emprendedor les asusta.
No quieren complicarse la vida montando un negocio y prefieren tener la seguridad de tener una nómina.
¿Es imposible ser nómada digital en este caso?
Claro que no.
Existen muchas ofertas de trabajo remoto para nómadas digitales que quieren trabajar por cuenta ajena.
Muchas empresas ya no quieren trabajadores que cumplan un horario, sino empleados que se focalicen en cumplir objetivos. Si a eso le sumamos las posibilidades de trabajar en equipo en remoto, la necesidad de tener a la persona físicamente disminuyen.
Ya puedes trabajar para una empresa sin tener que ir a una oficina y pudiendo organizar tu tiempo como quieras. Tienes la libertad del nómada digital, con la seguridad de cobrar un sueldo todos los meses.
Sin retórica o palabras que lo adornen, ¿no?
Estamos hablando de cambiar tu vida y tú quieres tener números reales encima de la mesa para tomar una decisión.
Bien, pues yo te los voy a dar.
El primer año de vida cuando creé mi propio proyecto online (2015) ingresé 23.532€. El segundo (2016) tripliqué la cifra llegando a 68.372€. El año pasado (2017) batí récord de ingresos llegando a los 190.284,49€ en un solo mes.
Actualmente, he superado los 615.233,45€ de facturación con mi propio proyecto online, en un total de 43 meses.
Si haces cuentas, facturo 14.307€ cada mes trabajando en algo que me apasiona.
Un buen sueldo, ¿no te parece?
No obstante, no quiero que pienses que esto es un camino de rosas, que te vas a forrar en unos pocos meses y vas a poder tumbarte a la bartola.
Esto no funciona así.
Sé que cuando enseño lo que gano la gente se queda impactada, pero detrás de esto hay muchas cosas que no ves.
Esto son los gastos del negocio, pero como nómada digital también tienes que controlar lo que te cuesta vivir viajando.
Piensa en:
Para terminar este apartado quiero que te quedes con una idea:
Puedes ganar mucho dinero con un negocio online, mis cifras son reales y si yo lo he hecho, tú también puedes, pero eso no significa que sea fácil.
Prepárate para formarte en todo lo que tiene que ver en negocios online, marketing digital, blogging, marca personal, etc.
Y, por supuesto, mentalízate de que vas a trabajar como un loco. Sobre todo al principio.
Llegados a este punto, espero que tengas claro que el nomadismo digital es un nuevo modelo para trabajar con independencia. Para que seas libre geográfica y temporalmente.
Pero todavía te falta algo importante: ver ideas para ser nómada digital.
O lo que es lo mismo, ver ejemplos reales de distintas profesiones que podrías ejercer como nómada digital.
La realidad es que este listado podría ser infinito porque cualquier trabajo que puedas realizar desde Internet te permite convertirte en nómada digital. Sin embargo, quiero aprovechar este apartado también para hablarte de varias de las que están consideradas “profesiones del futuro”.
Empleos de los que ya existe una gran demanda (y que seguirá creciendo sin lugar a dudas).
Vamos a ello:
Cualquier trabajo que tenga que ver con Internet está en expansión. Estos profesionales son indispensables para poder personalizar cualquier aspecto de una web, optimizar su velocidad de carga, añadir más funcionalidades, etc.
Este trabajo siempre ha existido y existirá. Se trata de un profesional que te aconseja y orienta acerca de una determinada temática. Así, podemos tener a un consultor de finanzas, de desarrollo personal, de estrategia de negocio, de deporte…
La cuestión es que gracias a Internet esta profesión vive una época dorada. Y es sencillo ver el motivo. Como te decía arriba, ahora es mucho más fácil poder realizar una vídeo llamada a través de Internet.
Teniendo conexión a Internet puedes reunirte con cualquier persona independientemente de en qué parte del mundo se encuentre.
Ocurre lo mismo que con el caso del programador, ahora cualquier empresa o profesional necesita una web. Y para que esa página resulte atractiva necesitas a un diseñador.
Es otra profesión que ya está en pleno auge pero que seguirá creciendo.
Al igual que con la profesión que vamos a ver a continuación, los fotógrafos tienen una nueva y jugosa vía para monetizar sus fotografías.
Se trata de los bancos de microstock.
Las webs necesitan imágenes con las que llenar sus páginas y contenidos, y con estos bancos, solucionan este problema. Por una cuota mensual, cualquier persona puede descargarse un número determinado de imágenes.
Como fotógrafo, el negocio está en que son unos ingresos muy escalables. En cuanto tengas una foto subida en el banco, es una imagen que te puede generar ingresos de forma indefinida.
No solo es posible ganar dinero por escribir, sino que es una de las profesiones más demandada en estos momentos.
Cualquier negocio online necesita generar contenidos: posts, actualizaciones para las redes sociales, newsletters, emails de venta… por lo que contar con un profesional que genere todos esos textos se hace indispensable.
Aquí hay que diferenciar 2 figuras:
Si se te da bien escribir, te aseguro que tienes mucho trabajo por delante.
Si crear contenidos es obligatorio para cualquier negocio online, traducirlos es indispensable si quieres abrir mercado y conseguir clientes de otros países.
Te damos una serie de consejos para ganar dinero en Internet traduciendo documentos:
No obstante, ser traductor te abre la vía a otra opción: ser profesor online del idioma que dominas. No será por no tener opciones. 😉
Hasta ahora hemos visto profesiones que en estos momentos están auge, pero no hay que olvidar que existen otros tipos de negocios muy interesantes.
Toma buena nota si tu intención es convertirte en nómada digital emprendedor. 😉
Como ves, opciones no te faltan.
Partimos de la idea de que tu oficina o espacio de trabajo es el mundo. Teniendo una buena conexión a Internet y un portátil, tu trabajo puede ir contigo a cualquier lado.
Fíjate en esta imagen.
Ahí me ves trabajando con las pirámides de Egipto a mi lado.
Aquí estoy en medio de la nada en la furgoneta que alquilamos para recorrer en Australia.
Gracias a Internet tienes la suerte de poder trabajar como nómada digital en cualquier parte. La oficina y equipo de tu negocio online irá contigo en tu mochila.
Tú decides cuáles quieres que sean las vistas. 😉
No obstante, esto también tiene una cara B. Nunca es todo de color de rosa.
El no tener un sitio fijo de trabajo hace que te distraigas más fácilmente y que tu productividad baje. Y eso sin contar ruidos, distracciones inesperadas o que no haya wifi donde tú pensabas que sí (algo que ocurre más veces de lo previsto).
También, en épocas de mayor trabajo es posible que te toque buscar una casa.
A nosotros nos ocurrió cuando lanzamos la END. Ante la inmensidad de trabajo que teníamos por delante, decidimos alquilar un piso en Chiang Mai, Tailandia, durante 3 meses.
Sí, dejamos de viajar durante una temporada, pero a veces se hace necesario.
Está claro que necesitas un portátil (con su cargador) y una buena conexión a Internet, pero la realidad es que en tu oficina virtual necesitas unos cuantos recursos más.
Esto sería todo lo que tienes que llevar de forma física, pero luego hay muchas otras herramientas que necesitas:
Como te imaginarás, dentro de mi negocio uso muchísimas herramientas online y sería imposible ponerte aquí todas, pero tampoco era el objetivo.
Lo que quiero que veas es que es posible vivir traviajando, llevando tu oficina en la mochila. Sé que puede dar miedo de primeras: “me faltará algo”, “me quedaré sin conexión”, “habrá algo que no pueda hacer por Internet”…
Pero te aseguro que no es así. Hay muchísimos nómadas digitales que trabajan desde cualquier parte del mundo, sus alojamientos son de lo más variopintos, y al final, sacan todo adelante.
Truco extra: ¿es compatible cobrar el paro y ser nómada digital? Si tienes derecho a paro puedes utilizar este dinero para pagar las cuotas de la seguridad social o para poder cubrir los gastos iniciales. Tiene sus condiciones, pero es una ayuda más para cuando empieces. 😉
Al principio de este post te explicaba que el nomadismo digital no es una profesión, sino un estilo de vida.
Y es la verdad.
Por eso, antes de tomar esa decisión, es importante que tengas en cuenta estos 4 puntos.
Esto es lo primero que debes tener claro.
¿Te has planteado alguna vez estas preguntas?
La realidad es que es normal que tengas dudas. Si te soy sincero, yo no estoy seguro de lo que haré el día de mañana, pero lo que sí sé es lo que me apetece hacer hoy y a medio plazo.
Quiero seguir conociendo lugares increíbles que me sigan demostrando lo maravilloso que es el mundo.
Aunque de primeras te pueda sonar alucinante el reinventarte como emprendedor, tienes que valorar bien los pros y los contras.
Pero tranquilo, que eso no significa que tengas que renunciar a tener libertad para poder hacer lo que quieras.
Hay cada vez más nómadas digitales que usan otros modelos de negocio como el de freelance o de trabajador por cuenta ajena (recuerda que los vimos antes).
¿Te gusta viajar sola?
¿Hacer un retiro de meditación cuando te lo pide el cuerpo?
¿O sencillamente quieres tener la libertad de viajar a Buenos Aires mañana, saltar a la semana siguiente a México sabiendo que puedes volver a España cuando te apetezca
Sí puedes.
De hecho, ese es uno de los objetivos de la END: proporcionarte las herramientas para que puedas llevar tu vida como te dé la gana. 😉
Se consideran ingresos pasivos a todo aquel dinero que generas de forma automática sin que tú tengas que hacer una inversión de tiempo continuada.
Muy importante la palabra “continuada” aquí.
Por ejemplo, cuando hablamos de cómo ser nómada digital freelance vimos que son personas que venden servicios. Es decir, realizan una tarea para ti.
Todo este tipo de actividades conlleva para el freelance invertir una parte de su tiempo en realizar eso que le han encargado. En otras palabras, está vendiendo su tiempo.
¿Problema?
Puede llegar a saturarse ya que el tiempo no es escalable (no puedes dividir tu persona en 5 para estar realizando 5 trabajos al mismo tiempo).
Por eso cobran tanta importancia los ingresos pasivos. ¿Qué se puede hacer? Te damos ideas:
La realidad es que no es sencillo, pero es más que posible. En los últimos meses, de media, suelo ganar entre 2.000/3.000 euros al mes solo con los infoproductos, pero también he tenido meses en los que he llegado a ganar 10.315,89€.
Vivir viajando o tener un trabajo de nómada digital no significa no tener ninguna rutina. Al contrario, lo ideal es que establezcas hábitos porque si no, puedes volverte loco a la hora de sacar el trabajo adelante.
Ojo, con esto no quiero decir que tengas que tener una jornada de lunes a viernes de 8 horas.
Hay personas que prefieren ganar menos y tener jornadas de solo 6 horas diarias. Yo, por ejemplo, concentro el trabajo los fines de semana (cuando no me gusta visitar nada porque todo está plagado de turistas) y durante el resto de los días trabajo mucho menos.
Encuentra cuáles son tus mejores momentos del día o adapta tu horario según tus responsabilidades familiares. Es lo mismo, lo importante es que fijes unos hábitos.
Consejo: esto también es bueno para tus tareas. Mantener una rutina en cuanto a qué hacer primero y establecer un orden, te ahorrará mucho tiempo. 😉
Fundamental.
Necesitas estudiar para ser nómada digital.
Bueno, en realidad como tal no lo necesitas. Puedes decidir formarte en modo DIY (Do It Yourself) y consumir los millones de contenidos que hay en Internet.
¿Cuál es el problema?
Que vas a tardar muchísimo más.
Piensa que así no tienes a nadie que filtre por ti toda esa información. Lo que ocurrirá será que te infoxicarás y de tanta información en la cabeza… no sabrás ni por dónde empezar y te dispersarás.
¿Que te dan las formaciones de pago?
Foco.
Una hoja de ruta.
En Internet no es muy difícil encontrar un trabajo digno con un sueldo decente o montar un negocio online; lo que sí es difícil es no perderse entre la montaña de tareas que tienes que hacer.
De ahí lo bueno de una formación de pago.
Tienes a una persona con experiencia y que ya ha vivido lo que tú estás pasando ahora que te puede aconsejar.
Cuando me dije a mí mismo: “quiero ser nómada y dar la vuelta al mundo”, empecé a preguntarle a todo el mundo cómo lo podía conseguir, cómo lo habían hecho.
El resultado fue malísimo.
Salí con más preguntas todavía.
Quiero que entiendas que no hay fórmulas mágicas y que esto es una carrera de fondo y no un sprint.
Ser nómada digital no es:
Ser nómada digital es un estilo de vida y cada persona lo puede vivir de una forma. Por eso, aunque ahora te voy a dar esos consejos que a mí no me dieron cuando empecé… ten en cuenta que esto es lo que me funcionó a mí.
Tú tienes que encontrar tu propio camino. 😉
Simplemente ve a tu ritmo.
Hay personas que se pasan meses en un sitio y otras que llevan un ritmo más rápido. Cris (mi pareja) y yo solemos cambiar de sitio cada 4 o 5 días, aunque a veces por trabajo nos hemos quedado más tiempo en un sitio.
También puedes padecer el síndrome del viajero eterno y sentir que tienes que viajar constantemente… Si es tu caso, mejor que te lo tomes con calma. XD
No hay ya excusa para esto.
Con la cantidad de recursos que existen tanto de pago como gratuitos por Internet, el que no hables inglés es porque no quieres.
Pero no estoy aquí para echarte la bronca si no para darte posibles situaciones:
No obstante, aunque el inglés es casi un idioma universal, lo cierto es que hay países o zonas en las que no se habla. Aprende siempre unas palabras básicas como “hola”, “si”, “no, “gracias” o “por favor” para, por lo menos, poder ser cortés.
Ya dije antes que para mí hacer turismo no es viajar. Uno de los grandes alicientes de conocer otras culturas es poder compartir experiencias con la gente local.
Aprender de su manera de vivir o de entender las cosas es algo que no tiene precio y que da sentido al viaje. Sin eso, viajar sería como coleccionar fotografías. Todo fachada y poca verdad.
Para viajar con una mochila a cuestas tienes que fortalecer un espalda o en algunos momentos se te hará bastante duro.
En nuestro caso que además trabajamos con el ordenador, intentamos siempre dedicar un rato a hacer ejercicio y mover el cuerpo. El mundo es como un gran gimnasio, te aseguro que hay miles de sitios donde puede practicar ejercicio.
¡A mover el body!
Montar un negocio, trabajar como freelance o para otra persona mientras viajas puede resultar estresante en muchos momentos.
A veces la conexión a Internet no es buena, un viaje se retrasa o, simplemente, todo se tuerce. Los momentos malos llegarán antes o después, eso es inevitable; lo importante es cómo los afrontes.
Por eso, además de desarrollar tu inteligencia emocional, aprender a meditar para relajar tu mente en esos momento más tensos te será muy útil.
Como siempre digo: “no tengo vida privada, ni la quiero, puedes ver todo lo que hago en las Redes Sociales”.
Disfruta del viaje y ayuda a los demás compartiendo toda esa información útil que has descubierto. Además, si tienes visibilidad, podrás dar a conocer proyecto sociales interesantes o mostrar la realidad de algunas zonas.
Truco extra: ¿qué mejor forma de compartir también tu vida que la de hacer trueques? Lo que para ti puede ser insignificante, en algunos sitios se considera un “diamante”. Seguro que vives más de una situación divertida. 😉
En la línea de lo que te acabo de comentar.
Tanto esta web como la de Inteligencia Viajera son la “sede” de la comunidad nómada digital, un grupo de chiflados por la vida que creen que otra vida más libre es posible.
Ayuda a los demás en todo lo que puedas. Te aseguro que te será devuelto multiplicado por dos. 😉
A pesar de que este artículo tiene más de 5.000 palabras, la realidad es que es solo un resumen muy corto de todo lo que implica adentrarse en una aventura así.
Gracias a mi proyecto yo estoy cumpliendo mi sueño de dar la vuelta al mundo. Vivir viajando parecía una utopía hace 4 años y ahora es mi vida.
Sí, es así.
En 2014 salí de la Universidad tras haber terminado de estudiar Arquitectura y, al igual que a ti, el mundo me preparaba un ámbito laboral penoso. Lo mejor que pude conseguir fue un trabajo por 300€ al mes trabajando como delineante. Estaba encerrado 12 horas al día en un estudio haciendo lo mismo día tras día.
Un trabajo mecánico, un sueldo ridículo y una vida mediocre.
Pero aunque estaba muerto de miedo, decidí arriesgarme. Me formé con los mejores y me gasté todo mi dinero (y el que me prestaron mis padres) para crear mi propio camino.
La ventaja que tienes tú a diferencia de mí es que ahora ya hay cursos para nómadas digitales específicos. Formación enfocada a los problemas reales a los que te vas a enfrentar como nómada digital.
Mucho de lo que yo he aprendido lo tuve que descubrir a base de prueba y error.
Ahora tú puedes aprender de mi experiencia.
¿Qué dices?
¿Te apuntas? 😉
¡Te espero dentro!
Fuente de consulta Nómada Digital